Para empezar a comprar ropa necesitamos una ciudad llena de
tiendas, como por ejemplo, Barcelona. Una ciudad, con mucho movimiento y muchas
tiendas. Muchas de sus calles tienen unos bonitos escaparates, con ropa o
muebles o cualquier cosa que se pueda vender. Si pasear por esas tiendas podrás
observar los diferentes tipos de
vestimenta que hay: retro, clásico, punk, gótico… Muchos de ellos que puede que
ni hayas oído hablar. Pero si ya sabes lo que quieres comprar o al menos te
haces una idea, sabes que seguro que encontraras tu tienda, pero si prefieres
ir mirando por todas la ciudad, seguro que te llevara un buen rato.
También es importante con quien ir de compras, porque si vas con algún
hombre seguro que se estresa y que quiere irse mientras tú disfrutas entre la
ropa. Pero si no tienes ningún otro remedio lo tendrás que comprender. Lo mejor
que puedes hace es ir con una de tus amigas, porque a si seguro que tienes con
quien compartir las ideas, porque a tu madre le gusta todo lo que llevas puesto
y tu padre… de moda poco. A sí que cuando ya lo tienes todo decidido, tienes
que pasar a la acción.
Ir mirando por todas las tiendas que veas y probarte lo todo, es
la manera más divertida, porque puede ser que aquellos pantalones que te encanta te quede fatal i aquella falda que…
bueno ni te gusta ni… te quede genial y al final te acabe enamorando. Acabar con las manos llenas de
bolsas es una buena sensación ya que piensas que todo aquello que tienes dentro
de ellas es solamente tuyo. Tienes que ir con cuidado porque a veces cuando
tienes muchas bolsas, puede ser que te dejes una en un probador y no volverlo a
encontrar. Después de un día comprando ropa lo mejor que puedes hacer es ir a
tomar un buen batido.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada